Las autoridades mexicanas desmantelaron una red de empresas que vendían las cajas de alimentos destinadas a los Comités Locales de Alimentación y Producción (Clap) con sobreprecios y con productos de baja calidad, dijo este jueves Alfo Lira, titular de Subprocuraduría especializada en investigación de delincuencia organizada del país norteamericano.
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“De acuerdo con la investigación, este grupo de empresas y personas físicas (mexicanas y extranjeras), han obtenido recursos desviándolos de sus fines humanitarios, para, en cambio, adquirir alimentos y especular comercialmente con ellos, aprovechándose de la carestía alimentaria que aqueja a Venezuela”, dijo Lira, según reseña una nota de prensa de la Procuraduría General mexicana.
El funcionario no especificó el nombre de las empresas, pero dijo que detectó “la existencia de diversos operadores, como el señor Alex “N”, aparentemente relacionado con autoridades del gobierno de aquel país, así como Álvaro “N”, Emmanuel “N”, Santiago “N” y Andrés “N”, quienes; con el propósito de obtener los productos alimenticios que deben suministrar al gobierno venezolano, acuden a diversos países (entre ellos, México) para contactar con otras empresas”.
El funcionario detalló que las operaciones consistían en “adquirir productos de baja calidad, exportarlos a Venezuela con sobre precio y, a través de los Clap, revenderlos a la población venezolana en un valor 112% mayor al costo real”.
El programa de los Clap comenzó en marzo de 2016 y desde entonces provee una pequeña cantidad de productos básicos, con cierta regularidad a 70% de la población venezolana a precios subsidiados.
Las autoridades mexicanas dijeron también que “celebró un acuerdo reparatorio con diversas personas físicas y morales (empresas) involucradas en la investigación”, que consiste en las siguientes acciones:
1.- Los imputados harán entrega al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) de la cantidad de $3.000.000 (…) los cuales serán destinados para atender el mandato de la Acnur en América Latina y el Caribe.
2. Los imputados se comprometen a no efectuar, o través de terceros, ningún acto comercial con el gobierno de Venezuela o terceros, que operen o se encuentren relacionados con el envío y comercialización de alimentos o medicinas con motivo del programa Clap.
El funcionario agregó que “con motivo de la investigación realizada, se localizaron 1.300 contenedores marítimos en tierra mexicana, que contienen aproximadamente 1,8 millones de despensas alimenticias (cajas Clap), cuyo destino era el país de Venezuela”, provistas por los empresarios relacionados con la presente investigación.
“Al analizar que los productos alimenticios son perecederos y que tienen como destinatarios finales la población de Venezuela, se tomó la decisión de no impedir que fueran transportadas y entregadas a sus beneficiarios; pues de lo contrario se corría el riesgo de agravar la crisis alimentaria que se vive en esa nación, de que se empalme o se aproxime la caducidad de los productos o de que su entrega se realicen en condiciones no aptas para el consumo humano”, indicaron.
Adicionalmente, las autoridades mexicanas se comprometieron a compartir la investigación “con las autoridades competentes a nivel internacional con objeto de continuar la cooperación en la lucha contra el lavado de dinero y en particular, de este esquema fraudulento”.
El movimiento de dinero relacionado con las cajas Clap es objeto de investigación en varios países como Colombia. El sitio web Armando.info ha mostrado en una serie de reportajes los vínculos del empresario colombiano Alex Saab y su empresa Group Grand Limited, con las compras en México y otros países. Los autores de los trabajos periodísticos se vieron obligados a salir de Venezuela luego de que el empresario los demandara.
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